La Guía de Vinos del Grupo Gourmets otorga este reconocimiento a la bodega bicentenario en la 36ª edición de sus premios en cata a ciegas.
Reliquia Amontillado de Bodegas Barbadillo ha sido reconocida con el premio al mejor generoso en la 36ª edición de los Premios Guía Vinos Gourmets.
La Guía Vinos Gourmets es la más veterana de las publicaciones vitivinícolas españolas, publicándose desde 1983. Tras la valoración de 3.740 vinos, el Comité de Cata de la Guía Vinos Gourmets 2021 ha premiado aquellos que les han transmitido una sensación sobresaliente.
La bodega Sanluqueña Bodegas Barbadillo suma este reconocimiento en el año de su bicentenario a las Medallas de Oro otorgadas a sus vinos ecológicos Sábalo y Patinegro en el prestigioso certamen ‘International Organic Wine Award’, y a Manzanilla Pastora pasada en rama en el International Wine Challenge (IWC).
Reliquia Amontillado de Barbadillo, un generoso para meditar
De complejidad equilibrada, punzante y elegante, Reliquia Amontillado es un vino generoso muy seco en boca. Se recrea con un recuerdo salino de su lejana crianza biológica como manzanilla, y seducen los finos toques a maderas nobles de su porte singular. Un amontillado para meditar.
Bodegas Barbadillo designa con el término ‘Reliquias’ a aquellos vinos de mayor envejecimiento cuyo origen data de la primera mitad del siglo XIX. Cada año se embotellan un máximo de 260 “ejemplares” entre Amontillado, Palo Cortado, Oloroso y Pedro Ximénez.
Reliquia Amontillado es el resultado de la unión de dos soleras viejísimas: la de Amontillado Soberana, que envejecía en la Bodega El Toro, y la de Amontillado Hindemburg del Conde de Aldama. Antonio Barbadillo Ambrossy cambió a finales del siglo XIX diez botas de manzanilla por cada una del amontillado del Conde de Aldama.
En 2020, Armando Guerra, responsable de Descomunales Vinos Comunes (Alta Gama de Barbadillo), lideró la creación del nuevo formato de medias botellas de las Reliquias con el objetivo de “reordenar y compartir” y dar un mayor protagonismo al vino. El diseño de las etiquetas, que cambiará con cada saca anual, está realizado y pintado a mano por el prestigioso calígrafo madrileño Goyo Valmorisco.