Mireia Server Mulet es CEO de Rolser. Incorporada en la empresa desde el año 2000, fue pasando por diferentes áreas hasta el 2004, donde se creó el departamento de exportación, el cual gestionó con un equipo de mujeres. En el 2018 se acuerda nombrar directores generales a Vicent Server Roselló y Mireia Server Mulet.

Rolser es una empresa familiar dedicada al diseño y elaboración de carros de compra, escaleras y tablas de planchar. ¿Cuáles son los valores diferenciales de vuestra marca?

Desde los inicios siempre hemos apostado por dar un carácter diferenciador a nuestros productos para que quien los consuma y los vea sepa que es un Rolser. Siempre cuidando la marca, la calidad, el diseño y ahora incluyendo el respeto por el medio ambiente, buscando tendencias y versatilidad sin dejar a un lado la comodidad. Porque al final diseñamos productos que hagan la vida más fácil a las personas, tengan la edad que tengan.

Siendo una empresa familiar, ¿cómo os adaptáis a los cambios sin perder la esencia de vuestras raíces?

Una empresa familiar transmite de generación a generación sus valores de la misma manera que unos padres a sus hijos. Se lleva en la sangre, es algo que se vive, se respira y se alimenta tanto dentro como fuera de la empresa.

¿Cuáles son los elementos imprescindibles a la hora de gestionar la marca de una empresa familiar?

Tenemos la suerte de quienes entran a formar parte de Rolser nos conocen por cercanía al territorio y conocen a la Familia Server (esta es una de las ventajas de vivir en un pueblo). Además, los más de 50 años de historia de la empresa ayudan mucho.

Los valores de la empresa son el cuidado de la marca, que se relaciona con la innovación, la calidad y el diseño. De cara al consumidor, cuidamos hacer productos que ayuden en el día a día. A las personas de nuestro equipo las acogemos como uno más de la familia y el hecho de que se sientan bien en la organización los convierte en unos excelentes embajadores de la marca. Cuidamos que estén a gusto implantando, por ejemplo, una jornada laboral de 7h a 15h donde pueden conciliar tiempo con la familia o simplemente tener tiempo libre para sí mismos. La cercanía con el equipo sin jerarquías frías, el kit de bienvenida que les damos, además de jornadas lúdicas que hacemos para conocernos más, son muy valorados.

Este año sois colaboradores de la Clec Fashion Movement 2021, la pasarela de moda valenciana en la que diez diseñadores realizarán el diseño diez carros de compra de Rolser. Sin duda, una acción que refuerza la innovación constante y la apuesta por el diseño de productos como valores diferenciales de Rolser. ¿Qué significa para vosotros participar en este evento y qué aporta a la marca?

Nuestro objetivo es mostrar que el carro de compra es un accesorio más, que no tiene género ni edad y, más enfocado en este último punto, queremos mostrar a los jóvenes que llevar un carro no los incluye en un grupo determinado (como el de la madre o la abuela).

Nos esforzamos por llevar la tendencia de la moda a nuestros artículos, carros y shopping bags y mostrar que, a parte de la comodidad de llevar la carga de un lugar a otro, contribuyes con el medio ambiente, ya que dejas de usar productos de un solo uso. Además, tenemos una línea con materiales reciclados que queremos ampliar cada vez más.

La sostenibilidad es una de las claves para las marcas a la hora de afrontar los desafíos actuales. En Rolser contáis con el proyecto #THINKGREEN. ¿De qué trata este proyecto? ¿Qué otras acciones lleváis a cabo para hacer vuestro negocio sostenible?

Tenemos un objetivo claro y es dejar a nuestras próximas generaciones un mundo mejor. Y la forma de hacer esto desde nuestra empresa es a través de muchas acciones que generen un impacto importante.

Como empresa estamos llevando a cabo acciones como la reducción de residuos, procesos productivos más respetuosos, implementando placas solares y recientemente nos hemos adherido al Pacto Mundial de las Naciones Unidas para llevar a cabo nuestra política de RSC.

En cuanto a producto, queremos cada vez más tener una línea de productos hechos con materiales reciclados, veganos, naturales. Hemos eliminado el plástico en la mayoría de los embalajes.

Por ejemplo, las fundas de la tabla de planchar. ¿Por qué hay que empaquetarlas con una bolsa de plástico? Porque siempre se ha hecho así, ¿debemos de continuar haciéndolo? Si las toallas van sin bolsa de plástico, ¿por qué las fundas tienen que llevarla? Te encuentras muchas incongruencias como estas que son difíciles de cambiar en la mente del consumidor, cuando “es que siempre se ha hecho así”. Pero con mucha pedagogía, comunicación y haciendo partícipes a los clientes de lo que estamos haciendo y explicando por qué lo hacemos, nos encontramos con que, al final, todos estamos aliados por una causa común.

La compañía ya vende sus productos en más de 60 países. ¿Cuáles son los principales criterios de selección que deciden la entrada a un nuevo mercado?

En los países donde el uso y costumbre es conocido no hay problema y es relativamente fácil su introducción en el mercado. Pero nos encontramos con que los carros no son conocidos en todos los países, donde no tienen esa costumbre de uso, pero en lugar de verlo como una dificultad para nosotros, nos gusta afrontarlo como una gran oportunidad.

Esto nos pasó, por ejemplo, en EE.UU. la primera vez que expusimos en una feria, donde las personas que pasaban por el stand decían lo bonitos que eran los carros, pero la pregunta que nos hacían era “¿Qué son?”. Esto nos causaba mucha sorpresa porque el producto en sí ya existía en el país, pero físicamente era totalmente diferente al nuestro. En EE.UU. el carro de compra era una cesta metálica cuadrada y de repente veían que nuestro carro era una bolsa de tela de diferentes colores y estampados, con un chasis de aluminio con diferente número de ruedas.

De cara al futuro, ¿cuáles son los retos a los que os enfrentáis?

Nos gusta ver nuestro futuro lleno de proyectos. Nos apasiona la innovación, crear nuevos diseños, nuevas aplicaciones, accesorios y mejoras en los artículos actuales. Como decimos en Rolser: “Reinventarse. Crecer. Evolucionar. Llegar al objetivo y, una vez conseguido, volver a empezar”.