Juan Manuel Perán Bazán es desde junio de 2016 presidente ejecutivo del Grupo Pikolinos, dando el relevo a su padre, Juan Perán, que estuvo al frente de la compañía desde su creación, en el año 1984. Segundo de los hijos de Juan Perán y Rosario Bazán, ya desde muy pequeño Juan Manuel mostraba su interés por la empresa, en particular, y por el mundo del calzado, en general. Su espíritu creativo y cosmopolita le llevó pronto a hacer las maletas y formarse en escuelas de calzado y comerciales en Alemania e Italia, explotando también otra de sus inquietudes, los idiomas. Habla con fluidez inglés, alemán e italiano, algo que le ha ayudado, y mucho, dentro de la empresa dado que Pikolinos opera en más de 60 países y tiene en la exportación un 80% de su volumen de negocio. Tras su formación y después de convivir con equipos creativos de firmas de calzado en Italia, Juan Manuel llega a Pikolinos y pasa directamente al departamento de Diseño. Ahí, al frente de su propio equipo, es el encargado de renovar la colección de señora y caballero de la firma. Su mentalidad de “siempre hay otra forma de hacer las cosas” le permite redefinir todos los procesos y crear flujos de trabajo para hacer las colecciones más dinámicas.

Juan Manuel Perán representa la creatividad, la organización, la eficiencia, la simplicidad de las cosas, pero también la constancia. Ha sido esa constancia en el trabajo, y su profundo conocimiento en todos los procesos de la empresa, el que le llevó a convertirse en vicepresidente ejecutivo de la Grupo Pikolinos, para después, en 2016, ocupar la presidencia, acompañado por su hermana mayor, Rosana Perán, como vicepresidenta y responsable del área financiera.

¿Qué importancia tiene la marca en el sector del calzado?

Es una parte fundamental, sin duda. Dentro del sector calzado la marca es un paraguas de soporte para los clientes y consumidores, una garantía de calidad, de servicio, de saber hacer. Debemos trabajar por tener un sector lo más consistente posible y para eso hacen falta marcas de prestigio internacional. Es nuestro mejor pasaporte al exterior.

Los valores de Pikolinos son constancia, creatividad, naturalidad, excelencia y confianza ¿cómo trabajáis para asociar estos valores a la marca?

En todos nuestros puntos de contacto con nuestros clientes. Desde el producto, a las tiendas, pasando por redes sociales, página web, catálogos… debemos e intentamos ser consecuentes con nuestros valores. Mostrarlos y defenderlos sabiendo que son precisamente estos valores los que nos han llevado a donde estamos hoy.

Vuestros productos apuestan por un acabado artesanal y la calidad de las pieles ¿funciona esto como ventaja frente a vuestros competidores?

Para nosotros sí. El acabado de la piel ha sido siempre la auténtica protagonista de nuestras colecciones. Ha sido nuestra carta de presentación al mundo y la hemos cuidado desde siempre. Nuestras colecciones tienen su personalidad propia en base a una piel que es tratada por nosotros mismos, en nuestra propia fábrica de acabados, para controlar en todo momento el proceso y la calidad final.

¿Cuáles son vuestros objetivos de cara a la internacionalización?

Consolidarnos en nuestros mercados maduros, principalmente los europeos, Estados Unidos y China. Y continuar nuestra apuesta por mercados emergentes donde tenemos mucho que hacer en un reto que afrontamos con ilusión y mucho optimismo. En esta apuesta internacional, sin duda, desarrollar nuestro modelo de tiendas propias tiene un papel muy importante. Nuestras primeras tiendas internacionales, en París, Kobe, Roma, Florencia, Brujas y Bruselas, han marcado el camino.

¿Qué retos se plantea la empresa para los próximos 5 años?

Queremos crecer como marca. Hacerlo de manera sostenida, con sólidos pilares que nos ayuden a llevar a cabo los retos que nos vamos marcando. Desarrollo de nuevas líneas de producto, desarrollar nuestra cadena de retail, afrontar la entrada en nuevos mercados y ser constantes en nuestra apuesta por el mundo online creo que son los pilares sobre los que debemos desarrollarnos.

¿Qué importancia tiene para Pikolinos el canal de venta online? ¿qué porcentaje aporta a las ventas totales de la marca?

Cada vez mayor. Es una ventana al mundo, el mejor escaparate que se puede tener. Abierto 24 horas, donde puedes decir cómo eres de la forma que quieres decirlo. Estamos ante un mundo apasionante, el digital, en el que estamos plenamente inmersos. Esperamos recoger frutos, pero no sólo a nivel de volumen de negocio, sino más aún, de reconocimiento de marca.