Tras el éxito de la solución para empresas presentes en el Mercado de Valores, la entidad española resalta la importancia de evidenciar estas buenas prácticas en empresas no cotizadas.
En 2021 AENOR lanzó la primera solución de certificación en materia de buen gobierno corporativo. Una certificación que, a día de hoy, ha respaldado las buenas prácticas de empresas de gran calado dentro la Bolsa Española. Tras este éxito y el creciente interés por las buenas prácticas en este ámbito, la entidad líder en generación de confianza ha visto la necesidad de desarrollar un esquema especialmente adaptado a las características de las empresas no cotizadas, como es el caso de las familiares. Por eso, AENOR ha creado una certificación de Buen Gobierno y Gobernanza en empresas no cotizadas.
Esta solución nace con la intención de que empresas y otras entidades jurídico privadas puedan generar seguridad y valor, sobre todo, de cara a sus grupos de interés. Según un estudio reciente de Esade, el 88% de las empresas españolas no cotizadas define el Gobierno Corporativo como un ámbito prioritario para su organización. Tanto es así, que las propias empresas reconocen que existe un mayor acercamiento a los requisitos de Buen Gobierno, en aspectos ya exigidos por normativa para las empresas cotizadas y al sector financiero.
La nueva solución de Buen Gobierno y Gobernanza de AENOR es una certificación innovadora, diseñada para mejorar y respaldar las prácticas de gobernanza en todo tipo de organizaciones, incluyendo sociedades mercantiles, asociaciones, fundaciones y cooperativas. Está basada en las normas UNE ISO 37000 Gobernanza de las organizaciones: Orientación y UNE ISO 37004 Gobernanza de las organizaciones. Modelo de madurez de la gobernanza: orientación, así como en las guías especializadas en la materia.
Esta solución recoge las mejores prácticas actualizadas en buen gobierno y mejora su contenido, permitiendo que las empresas demuestren su buen desempeño en este campo ante sus stakeholders: inversores, clientes, empleados, el propio regulador y la sociedad en general.
Las profesionalización y evolución de los modelos de buen gobierno de las organizaciones es una garantía de sostenibilidad a largo plazo y una responsabilidad que ha de acometerse de manera adecuada y proporcional. Por ello, se han establecido los siguientes puntos clave:
- Mejora continua: implementación de un sistema de gestión que promueve el perfeccionamiento constante en las prácticas relacionadas con la solución.
- Reconocimiento: la certificación avala las buenas prácticas de gobernanza y buen gobierno ante terceros, incluyendo a los accionistas y al resto de partes interesadas.
- Adaptabilidad: solución flexible que se adapta a diferentes tipos de organizaciones y estructuras de gobierno.
- Cumplimiento normativo: ayuda a las organizaciones a cumplir con las normativas y expectativas crecientes en materia de gobernanza y reporte no financiero.