El jueves 5 de noviembre se celebró el webinar ‘Arquitectura y envejecimiento: claves para la Golden Age’. Este encuentro, que contó con la colaboración de Arquitectura y Empresa, fue el primero del ciclo de encuentros virtuales promovido por el canal Contract del Foro de Marcas, un grupo conformado por Actiu, Andreu World, Bandalux, Cosentino, DAS Audio, Fama, Fermax, Fiora, Kalam, Keraben, Lladró, Roca, Simon y Válvulas Arco.
En esta oportunidad, Marc Trepat, socio director de BTA Arquitectura; Heitor García Lantarón, doctor arquitecto especialista en envejecimiento y responsable de diseño arquitectónico en la Fundación MATIA; y Óscar Miguel Ares, doctor arquitecto y socio en Contextos de Arquitectura y Urbanismo, se dieron cita para conversar sobre las tendencias y los modelos arquitectónicos de las residencias y lugares de convivencia para la población mayor.
Pedro Vargas, director de Proyectos Internacionales del Foro de Marcas, dio la bienvenida a los asistentes y explicó que la confluencia del envejecimiento de la población y la situación generada por la emergencia sanitaria y su impacto en las residencias de ancianos nos han puesto de golpe ante una nueva realidad: la necesidad de generar nuevas soluciones para una población cada vez mayor que busca algo distinto a lo que tradicionalmente se le ha ofrecido, buscando también mantener una buena calidad de vida. Surgen así modelos como el cohousing, las viviendas comunitarias o los apartamentos con servicios. Estas tendencias parecen haber llegado para quedarse, abriéndose así un mundo de oportunidades ante una demanda que necesita ser cubierta.
Marc Trepat centró su ponencia en la arquitectura y la atención enfocadas en la persona con el diseño de residencia humanas, sostenibles y económicamente viables. En primer lugar, explicó los aspectos arquitectónicos que facilitan este objetivo, entre ellos se encuentran: evitar los centros con imagen institucional y crear espacios que den la sensación de hogar, favorecer la orientación espacial y evitar el exceso de estímulos negativos, crear espacios exteriores positivos y seguros, entre otros. Introdujo además un aspecto que fue central durante el resto de la jornada y es que lo más importante en el diseño de residencias para mayores es hacerlas por unidades de convivencia.
Haciendo referencia a la situación generada por la crisis de la COVID-19, Trepat explicó que las residencias deben impedir la entrada del virus y, en caso de que entre, se debe evitar la expansión del virus por las distintas unidades de convivencia, lo cual representa otra de las ventajas de diseñarlas así, ya que esta estructura permite sectorizar el virus en caso de que entre a la residencia.
Seguidamente, Heitor García Lantarón explicó cómo el diseño aporta aspectos positivos en la creación de residencias centradas en la atención de la persona y destacó el trabajo de la Fundación MATIA, cuyo objetivo es acompañar a las personas mayores y favorecer su bienestar. Así, señaló que el diseño de los centros para mayores es importante, pero también lo son los cuidados, las actividades, el ambiente y el entorno para las personas que allí conviven.
Durante su ponencia, García Lantarón también mencionó aspectos como la integración, la interacción y la familiaridad, los cuales son aspectos clave para que las residencias puedan dar una continuidad en el estilo de vida de las personas que allí conviven, evitando el estilo institucional y dando una imagen más doméstica. Además, hizo referencia al confort acústico y lumínico, así como a la importancia del factor ambiental a la hora de diseñar las residencias.
Posteriormente, Óscar Miguel Ares compartió varios ejemplos prácticos de residencias para mayores, destacando que estos lugares son muy necesarios para la población mayor y los arquitectos deben tener la voluntad de aplicar el mejor diseño posible, pensando siempre en el bienestar de las personas que allí conviven y en los factores ecológicos para su buen funcionamiento.
Además, Ares mencionó que, más que crear un edificio, hay que crear lugares que permitan generar experiencias sensoriales para las personas mayores, crear hogares. Así, destacó la importancia de la creación de espacios comunes para la convivencia, ya que son muy importantes para que los “vecinos” de la residencia puedan tener la calidad de vida que necesitan, dado que las relaciones interpersonales son un aspecto primordial en el envejecimiento activo.
Para concluir el encuentro, los tres ponentes participaron en un coloquio moderado por Pedro Vargas, en el que respondieron las preguntas del público y destacaron aspectos como la viabilidad económica de las residencias diseñadas por unidades de convivencia; la generación de sinergias para rehabilitar barrios con un alto porcentaje de personas mayores; la necesidad de pensar en la creación espacios que se adapten a las necesidades de los residentes; hicieron recomendaciones a las empresas para la adaptación de sus productos de equipamiento para las residencias de mayores; entre otros temas.
